Créditos fotográficos: Сергей Хакимуллин
El conocimiento al que el análisis de los medios de comunicación social permite acceder hace posible experimentar un nivel superior de inteligencia empresarial. Tecnología y precisión se unen para dotar de objetividad algo que, de cualquier otra forma, sólo podría considerarse como eminentemente subjetivo. Contar con la solución adecuada, y el respaldo experto, es el modo de dar forma a masas de datos cuyo análisis tiene mucho valor que aportar al negocio. Sin embargo, todavía existen algunos mitos en torno al BI o a social media analytics. Mitos que merece la pena desmontar, para concentrarse en su contribución real a la empresa.
Los medios sociales se utilizan para opinar, hacer valer puntos de vista, criticar y recomendar, a partes iguales. Es normal que las empresas deseen tener acceso a esta información para aplicarla en el diseño de sus estrategias. No obstante, es necesario conocer cuáles son los límites de la inteligencia empresarial en este área y qué hay de cierto en las posibilidades de la analítica de medios sociales. Los principales mitos a desmontar son:
El análisis de medios sociales se usa sólo para conocer la reputación de la empresa en la web: aunque ésta es una posibilidad, la utilidad con más proyección para la inteligencia empresarial de todas las que permite el social media analytics es la de encontrar nichos de mercado. Acceder a este tipo de información permite conocer las micro-necesidades de los clientes, entenderlos mejor y poder prever cuáles serán sus movimientos. Ahí es donde reside el potencial.
El análisis de medios sociales no precisa de nada más: la visibilidad que social media analytics aporta a la inteligencia empresarial tiene un valor incalculable. Sin embargo, ¿por qué limitarse a una perspectiva? El conocimiento que se extrae de los clientes y los competidores puede, en ocasiones, requerir de complementos. Medios de investigación menos sofisticados y análisis más tradicionales pueden resultar el complemento idóneo para profundizar en algunos campos.
El análisis de medios sociales es sólo para las grandes corporaciones: nada más lejos de la realidad. Todo negocio tiene clientes y competidores, se mueve en un mercado y necesita tener la capacidad de responder a la demanda. En otras palabras, cualquier organización necesita inteligencia empresarial y ésta se nutre de datos, los que proceden del exterior, y deben ser procesados y analizados; y los internos, los registros históricos, que han de saber ser interpretados utilizando las herramientas adecuadas para extraer su valor.
La realidad de la analítica social media es que es preciso someter sus resultados a monitorización para aumentar su efectividad. Establecer indicadores y recoger métricas permite evaluar la idoneidad de las estrategias de medios sociales en cuanto al fomento de la audiencia, la conciencia de marca y la relación con los clientes; los tres aspectos que mayor valor pueden aportar a la inteligencia de negocio.
Post relacionados: