El éxito del Cloud en las empresas tiene mucho que ver con la opción, ya mayoritaria, de apostar por un entorno multicloud híbrido, una combinación de recursos on-premise con diferentes “sabores” Cloud ajustada al perfil específico de cada negocio.
IBM conoce a la perfección este panorama corporativo y sus necesidades, por lo que ha construido una oferta tecnológica completa y flexible para que cada negocio evolucione a su ritmo, con la máxima agilidad operativa, para afrontar los rápidos cambios de su entorno.
Según cálculos de la propia compañía, el 98% de las empresas tiene previsto utilizar esta estrategia en un plazo de tres años, para convertirse en un referente de la construcción de negocios inteligentes. Para ello, su amplia cartera de tecnologías IBM Cloud ofrece un ecosistema abierto que constituye la base para gestionar de forma coherente tanto infraestructuras como aplicaciones durante su ciclo de vida completo.
La base de su oferta plantea la gestión de aplicaciones y recursos, tanto en entornos tradicionales como Cloud, de forma transparente, con total visibilidad y control, y la automatización y gobernanza necesarias para una organización de nuestros días.
Como reconoce el vicepresidente de la consultora IDC, Stephen Elliot, “la vieja idea de que todo se iba a migrar al Cloud público no llegó a materializarse. En su lugar, el mercado ha evolucionado para satisfacer las necesidades de los clientes, que quieren mantener los sistemas en local y, al mismo tiempo, acceder a una gran cantidad de proveedores y plataformas Cloud”.
Con esta premisa en mente, la propuesta de IBM se estructura en los denominados IBM Cloud Pak, un variado elenco de alternativas que se ejecutan en una arquitectura de base, denominada Red Hat OpenShift Container Platform, para crear un ecosistema en el que se alojan desde las instalaciones en local hasta las nubes de cualquier proveedor, para gestionarlo todo, con máxima eficiencia operativa.
Con IBM Cloud Pak for Multicloud Management es posible obtener más aplicaciones y visibilidad en toda la empresa, de cualquier Cloud, público o privado. Este planteamiento mejora la automatización, simplifica la gestión de operaciones de TI y la ejecución de aplicaciones, y aporta la flexibilidad, ahorro de costes y análisis inteligente de los datos que demandan los negocios actuales.
Con este planteamiento, la gestión de entornos híbridos se simplifica al máximo, con un conjunto coherente de políticas de configuración y seguridad en todas las aplicaciones y clusters, que se completa además con el soporte integrado de la propia IBM para garantizar tanto su correcto funcionamiento como su conformidad.
En resumen, se logra una experiencia de gestión unificada en toda la empresa, con una entrega coherente de sucesos, aplicaciones e infraestructura y la gestión de múltiples clusters, independientemente de donde residan las aplicaciones: en local, en Cloud, en el borde o en cualquier lugar intermedio.