El tamaño de las empresas tiene un evidente impacto en sus recursos de storage. Obviamente, cuanto mayor es el número de operaciones, clientes y empleados, más recursos de almacenamiento se precisan. Pero eso no quiere decir que el resto de las empresas no necesiten recursos tecnológicos acordes a sus peculiaridades, presupuesto y estrategia.
El almacenamiento de datos consiste en la recopilación y conservación de la información digital, de los bits y bytes que se encuentran detrás de las aplicaciones, los protocolos de red, los documentos, el contenido multimedia, las libretas de direcciones y las preferencias de los usuarios, entre otros.
Desde las cintas y discos de los años 70, pasando por las unidades de disco duro (HDD) y las posteriores unidades de estado sólido (SSD), se ha llegado a los chips y memorias flash sólidas, con la aparición de pequeños dispositivos que caben en el bolsillo y almacenan copias de todo lo que queramos o necesitemos.
En general, hay dos grandes tipos de almacenamiento de datos: el definido por software y alojado en sistemas locales de storage y el almacenamiento en la nube. El primero aprovecha sistemas de software de gestión por extracción para separar los datos del hardware, mientras que el segundo organiza los datos almacenados en cualquier lugar para que se pueda acceder a ellos vía Internet, con una serie de permisos previos.
Para esto último no es necesario estar conectado a una red interna (conocida como almacenamiento adjunto a la red o NAS) ni que se acceda a los datos desde un sistema de hardware conectado directamente al ordenador.
El storage no es caro
Todas las organizaciones modernas, de cualquier tamaño y actividad, precisan de alguna solución de este tipo y existen variantes para empresas que buscan rendimiento y seguridad a precios asequibles.
Este es el caso de FlashSystem 5200, un miembro de la familia de IBM que soporta copias de seguridad inmutables, con copia protegida y tecnologías de almacenamiento de latencia ultrabaja, con excelente rendimiento, resiliencia y alta disponibilidad en un solo dispositivo en rack de pequeño tamaño y mínimo impacto medioambiental.
Una alternativa con menos coste que logra más y cuya gestión y mantenimiento son sencillos. Dos aspectos fundamentales para medianas y pequeñas compañías que pueden encontrar en esta tecnología su mejor alternativa.
Con tiempos de respuesta de 70 microsegundos, que puede escalar desde 1,7 Petabytes hasta 32 Petabytes de capacidad, virtualización externa y clustering de 4 vías, este modelo destaca por ofrecer una ciber resiliencia superior para detectar corrupciones de datos causadas por ciber ataques y tiempos de recuperación ultra rápidos.
La más moderna tecnología de storage para afrontar los desafíos del entorno actual, con enormes volúmenes de datos que deben procesarse con máxima velocidad, eficacia y seguridad.