La nube en sus diferentes modalidades y los recursos on-premises son piezas del mismo puzzle. Constituyen la base para mantener, agilizar y asegurar la información alojada en cualquier entorno. Por eso, IBM Spectrum Virtualize juega un papel fundamental en nuestros días para realizar una gestión de datos coherente, en diferentes ámbitos, hasta en los más 450 sistemas de almacenamiento que soporta.
Su diseño está pensado para el Cloud, servidores y almacenamiento en bloque que, además, aceleran el despliegue híbrido, sin necesidad de realizar una gran inversión. Y facilita una réplica basada en IP nativa, síncrona o asíncrona, para duplicar datos tanto en Amazon Web Services como en IBM Cloud, de modo que sea posible recuperar los datos en caso de desastre.
El almacenamiento definido por software tiene en IBM Spectrum Virtualize su principal exponente, gracias a esta capacidad de abrir los entornos de nube privada para dar cabida a los proveedores de servicios de nube pública, allanando el camino a una gestión global del almacenamiento en todas las instancias.
Desde los recursos privados, que ven ampliada su vida útil, hasta los que se alojan en nubes públicas, todos son manejados por esta tecnología basada en software de IBM. Como apuntan las encuestas, las organizaciones han emprendido este camino y en torno al 80% de ellas utiliza tanto aplicaciones y datos en nubes privadas como públicas.
Esta clara tendencia está alterando el status quo de muchas organizaciones, que ya no están interesadas en comprar más capacidad local, sino en escalar hacia la nube sus datos y aplicaciones, hasta el punto de que cualquier nueva implementación debe ser primero Cloud.
Aunque todo parece indicar que siempre habrá cierta cantidad significativa de estos recursos TI en local, la tendencia de llevar gran parte de ellos a la nube es mucho más que una simple opción. De hecho, cada vez más sectores confían en el Cloud, como vía clara de crecimiento y consolidación.
También favorecido por tecnologías como Spectrum Virtualize, muy interesantes para que el almacenamiento se parezca más a una aplicación (y menos a una "ocupación"), al añadir capacidades de virtualización que mejoran la eficiencia y flexibilidad de los centros de datos y dan acceso a los principales proveedores de servicios Cloud.
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