Social media monitoring (también conocido como social listening) es una parte del social media analytics que consiste en hacer un seguimiento sobre lo que se publica en internet en base al uso de una herramienta tecnológica que permita ejercer esta capacidad de control que, de otra forma, queda muy limitada. El objetivo de este tipo de acciones es adquirir una inteligencia de medios sociales que permita tomar las mejores decisiones.
Créditos fotográficos: "Collage Of Application Connection In The Global Social Networks" by KROMKRATHOG
La mayoría de las herramientas de social media monitoring, como la solución que Lantares tiene homologada en IBM, trabajan rastreando e indexando sitios web de forma continua y siguiendo cualquiera de las siguientes estrategias:
Rastreo en tiempo real, que permite un flujo continuo y permanentemente actualizado de datos. Debe ser la opción elegida para la recogida de datos de carácter más crítico y mayor relevancia.
Rastreo con frecuencias asociadas a periodos de tiempo de minutos, horas o días, en función de su grado de importancia. Se utiliza para información de menor importancia pero necesaria para el análisis y la perspectiva.
El modo de llevar a la práctica este seguimiento no es otro que:
1. Establecimiento de las menciones a monitorizar, es el único paso en el que no interviene la herramienta, sino que ha de realizarse en consenso y tras analizar las necesidades de negocio.
2. Identificación del número, lugar y frecuencia de aparición de cada mención.
3. Procesamiento de los datos recogidos que resulta en la estructuración de la información.
4. Análisis de los datos extraídos del social media monitoring.
La mayoría de las herramientas que se ocupan de cubrir las necesidades de las empresas en materia de social media monitoring tienen capacidad para rastrear, no solo los medios sociales propiamente dichos, como Facebook, Twitter, YouTube, Google+, Instagram o LinkedIn, sino también otro tipo de lugares en internet tales como:
Foros.
Blogs.
Sitios web de noticias.
Portales especializados en la recogida de opiniones de consumidores y usuarios.
Rastreando los contenidos que se publican se pueden encontrar menciones de distintos tipos. Las más habitualmente analizadas son las siguientes:
Menciones a la propia marca.
Menciones a algún producto o servicio de la empresa.
Menciones a la competencia o sus productos o servicios.
Menciones sobre un tema en particular.
El alcance del social media monitoring dependerá en gran medida de la potencia de la herramienta elegida para hacer frente a algunas de las limitaciones más frecuentes, como:
Variedad de sitios web donde realizar las búsquedas.
Idiomas distintos.
Filtrado del contenido irrelevante.
Capacidad para procesar jerga, sarcasmos o ironías.
Conocer las posibilidades del social media analytics y, en especial, del social media monitoring, plantean la inevitable cuestión sobre la ética de estas prácticas. Lo cierto es que las herramientas que permiten el social listening sólo pueden rastrear los datos disponibles al público:
Contenido expresado voluntariamente en diferentes lugares públicos de internet.
Contenido público expresado en medios sociales.
Nunca se traspasan las barreras de la privacidad y, por eso, se respetan los límites tales como cuentas de Facebook configuradas con determinadas opciones de privacidad o mensajes privados en Twitter. Es información pública y que, por tanto, se puede recoger con plena libertad y sin la preocupación de estar vulnerando derechos ajenos.