Hace pocas semanas nos ocupábamos del papel que juegan las herramientas de visualización de datos en la transformación de las grandes ciudades, especialmente a tenor del auge de los proyectos smart city (ciudad inteligente) que se empiezan a diseñar y a desarrollar como apuesta firme de futuro, especialmente en grandes núcleos urbanos con una importante afluencia de turismo.
Sin embargo, más allá de los beneficios que puede aportar el BI (como las herramientas de visualización) en el desarrollo y la dinamización económica de una gran ciudad, cabe también reparar en los efectos que puede tener la adopción de herramientas business intelligence por parte de administraciones públicas y locales en la mejora de la calidad de vida de las personas, especialmente de los propios habitantes de la ciudad o el núcleo urbano en cuestión.
Frecuentemente, se asocian al bienestar y la mejora de la calidad de vida cuestiones como la salud, la educación, el empleo, la seguridad y el acceso a nuevas oportunidades de las que alguien puede disfrutar en su entorno vital más inmediato. Por ello, es evidente que en cualquier proyecto smart city sean también estos asuntos los que, de un modo destacado, figuren como principales prioridades.
Existen numerosos ejemplos que dan fe de ello, como el recientemente aprobado proyecto de mejora de la seguridad en la ciudad holandesa de Eindhoven, que prevé emplear Big Data y herramientas de analítica avanzada para, entre otros aspectos, mejorar la seguridad nocturna de sus calles y lugares de ocio, reducir el gasto en limpieza y adecuación de espacios públicos, optimizar los recursos de emergencia, las asistencias médicas y la actividad de los cuerpos de seguridad, e incluso incrementar las oportunidades de negocio relacionadas con el turismo y una oferta de ocio, en conjunto, más segura y confiable.
No este, por supuesto, el único ejemplo de aplicación de herramientas BI y explotación de las ventajas que ofrece Big Data para la mejora de la calidad de vida en nuestras ciudades. Incluso existen ya varios casos de éxito en la implementación de proyectos smart city que han devenido referencia a escala internacional, como sucede con la aplicación del business intelligence en áreas del Ayuntamiento de Barcelona estrechamente relacionadas con la acción social y el bienestar de las personas.
En este proyecto en concreto, el Área de Calidad de Vida, Igualdad y Deportes del Ayuntamiento barcelonés ha confiado en las ventajas de IBM Cognos para unificar y optimizar los criterios de gestión de los distintos centros y recursos municipales orientados a prestar servicios que redundan en una clara mejora de la calidad de vida de la ciudadanía, un proyecto que se suma a los desarrollados anteriormente por el mismo consistorio para mejorar, entre otros aspectos (y de un modo similar al caso de Eindhoven), la gestión de la seguridad y la atención a emergencias por parte de la Guardia Urbana. Un ejemplo más, y claramente ilustrativo, de lo que el business intelligence puede aportar a ámbitos que se alejan de la estricta esfera de los negocios.
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