¿Está tu negocio preparado para la transformación digital? Ser consciente de la necesidad de cambio no es lo mismo que estar preparado para llevarla a cabo. Si bien muchas compañías, sin apenas darse cuenta, hace meses que iniciaron un proceso evolutivo que, tanto a nivel cultural, como a nivel tecnológico, les ha llevado a medio camino de consolidar su revolución; otras comienzan ahora su camino y se posicionan en la línea de salida de un recorrido que cambiará su manera de hacer negocios.
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Un replanteamiento de los procesos, una manera nueva, y más cercana, de relacionarse con los clientes, un nuevo enfoque para las operaciones... son sólo el principio de los cambios que trae consigo latransformación digital del negocio. Pero un reciente informe publicado por Forrester apunta a que, incluso para los más avanzados, todavía quedan bastantes retos por superar.
El punto más favorable que desvela este reporte incide en el hecho de que el 73% de los ejecutivos afirman que su empresa tiene una estrategia digital, sin embargo, el resto de los datos apuntan a una realidad algo distinta:
- Sólo el 21% de las empresas cuentan con los perfiles adecuados para definir una estrategia digital.
- Apenas el 19% de las compañías encuestadas disponen de la tecnología necesaria para ejecutar sus planes que les llevarán a la consecución de una empresa digital.
- Únicamente el 14% de las organizaciones cuenta con los procesos que se precisan para poder ejecutar la estrategia digital.
- Nada más que el 21% de los CEOs de las empresas encuestadas tiene una visión digital clara.
Sin embargo, el principal problema detectado por el estudio es el hecho de que el 68% de los ejecutivos considera que las unidades funcionales de sus respectivos negocios son la principal barrera al desarrollo de una estrategia de transformación digital.
Las organizaciones que consigan identificar sus puntos débiles y poner soluciones que les permitan avanzar hacia el cambio podrán ofrecer a sus clientes una experiencia diferente, de mayor calidad, que consiste en:
Avanzar hasta este nivel no está exento de dificultades pero, para alcanzar esta meta es preciso apostar por la innovación centrada en el cliente, conectar las nuevas tecnologías con capacidades de negocio mejoradas y no menospreciar la importancia de la agilidad, que debe ponerse a la altura de la eficiencia.