En los últimos años, las organizaciones de TI han reconocido las limitaciones de sus arquitecturas informáticas clásicas, basadas en enormes silos informáticos, con frecuencia ineficientes para dar respuesta a las demandas de recursos actuales, aunque su capacidad global pareciese en principio suficiente. Hoy deben dar un nuevo salto doble, cuantitativo y cualitativo. La rápida adopción de los nuevos modelos de datos, tipo Hadoop MapReduce o Apache Spark (que aprovechan al máximo los recursos en paralelo), está subrayando aún más esta necesidad e imponen un planteamiento más integrado de las TI. Se debe evolucionar hacia una infraestructura definida por software (SDI).
Su adopción introduce dinamismo y adaptación a las cargas de trabajo y de consumo de datos de cada momento, lo que permite a las organizaciones adaptarse automáticamente a las necesidades concretas, en todo momento y en tiempo real. Una SDI mejora el reparto y ejecución de las cargas de trabajo, orquestando la infraestructura para proporcionar los recursos necesarios a cada circunstancia y permite cumplir los SLAs.
Se trata de un tipo de plataforma, agnóstico desde el punto de vista tecnológico, que soporta la más amplia gama de hardware, entornos y APIs, con la ventaja adicional de asimilar las aplicaciones de hipercomputación y Big Data, así como los entornos más nuevos, nacidos en la nube, en una única infraestructura ágil, eficiente y muy veloz.
Una infraestructura definida por software aúna tanto los flujos de trabajo intensivos, en datos y en cómputo, mejor que una arquitectura basada en grandes silos informáticos, porque:
● Favorece la multipropiedad de los recursos, permitiendo a diferentes empresas y aplicaciones compartir la infraestructura de forma ordenada, basado en SLAs que gobiernan el uso y equidad de los recursos. Esta posibilidad reduce costes y facilita la adaptación de las IT a la evolución del negocio y de sus demandas de datos.
● Aprovecha mejor los recursos de cómputo de todo tipo, para lograr resultados 150 veces más rápido
● Escala para manejar enormes volúmenes de entrada y salida de archivos y cargas de trabajo, de sectores muy exigentes al respecto, como los de salud, tecnología o industria, donde un solo workflow puede ascender hasta un millón de archivos. La infraestructura definida por software admite una amplia variedad de arquitecturas y dispositivos de almacenamiento para dar respuesta a este volumen masivo de intercambio de datos.
El amplio portfolio IBM Spectrum Computing (antes IBM Platform Computing ™) proporciona una avanzada y probada cartera de soluciones de gestión de recursos y carga de trabajo, con IBM Spectrum LSF, IBM Spectrum Symphony ™ e IBM Spectrum Conductor ™: que ya se han ganado un lugar en grandes clientes globales, como Red Bull Racing, Wellcome Sanger Trust o Cypress Semiconductor. Además, IBM Spectrum Storage es el primer sistema de almacenamiento definido por software que se ha diseñado para simplificar y agilizar la gestión del almacenamiento en cualquier gran organización.
Esta infraestructura definida por software de IBM ya está ayudando a clientes que forman parte del ránking Forbes 2000, como Citigroup, a acelerar sus análisis hasta 100 veces, a la vez que redujeron sus costes de infraestructura, tanto internas como en la nube, y se adaptaron a las cambiantes demandas del mercado actual.