A continuación podrás leer un artículo sobre reporting financiero, pero si quieres profundizar en el tema puedes descargarte también nuestra guía: 12 Buenas Prácticas del Reporting Financiero
Los datos que se obtienen del reporting financiero, aparte de ser empleados para el análisis diario, se pueden utilizar para prever lo que puede pasar en los próximos meses o para definir las expectativas hasta final de año. Hacer una proyección de la empresa es necesario para constatar progresos, advertir desviaciones y reorientar y motivar acciones.
Hoy vamos a hablar del Forecasting, de qué es y que nos permite hacer.
¿Qué es el forecasting?
Prever y proyectar hacia el futuro los posibles resultados es lo que se conoce como forecasting y requiere de:
-
Realizar previsiones a partir de datos históricos o de información del mercado.
-
Aplicar métodos estándar de forecast (Real/Base, Media, Meta, Tendencia, Periódico, incremento anual, ajuste manual, etc.) y poder establecer métodos de previsión propios.
-
Poder crear escenarios y versiones comparables entre sí de forma multidimensional.
¿De qué manera puedo mejorar estas previsiones con una herramienta de fácil uso sin necesidad del departamento de IT?
La nueva herramienta de IBM,Cognos Analytics, es el complemento perfecto para nuestro negocio, ya que nos ayuda a transformar la gran cantidad de datos con los que trabajamos en información relevante y valor añadido para nuestro negocio. Con sus módulos personalizables podremos ver de forma mucho más visual los datos que nos interesan.
La importancia del forecasting
El forecasting es necesario en cualquier organización ya que permite:
- Crear hipótesis de trabajo en función de las necesidades o de las tendencias: por ejemplo para ver cuáles serían las consecuencias de cerrar una delegación, de lanzar un nuevo producto, de cancelar un servicio, de abarcar un nuevo territorio, etc.
- Comparar las hipótesis de trabajo creadas: por ejemplo, la perspectiva pesimista y la optimista para un mismo trimestre.
- Detectar una desviación y establecer una nueva previsión: por ejemplo, si para un periodo las ventas son muy inferiores a los esperado y es necesario corregir las previsiones para el resto de meses del año hasta fin de periodo, para poder así alinearse a los objetivos que se establecieron a principios de ejercicio.
- Realizar ajustes manuales para reorientar acciones: o incluso crear tu propio método para hacerlo automatizado.
