Pese a que la máxima "lo que no se puede medir, no se puede gestionar" es conocida por la mayoría de profesionales del mundo de la logística, todavía existen algunos ejecutivos que ven las métricas que los indicadores de gestión aportan sobre distintos aspectos como suficientes, pese a que éstos no han sido actualizados, ni sometidos a revisión desde su establecimiento.
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Lo cierto es que, no sólo es difícil de gestionar lo que no se cuantifica, sino que es casi imposible de mejorar. Por eso, los indicadores de gestión deben ser revisados periódicamente (o cada vez que se incorporan cambios en la cadena de suministro), para garantizar que siguen siendo relevantes y que todavía están midiendo las cosas correctas. Sólo de esta forma se puede mejorar el rendimiento del negocio.
Indicadores de gestión y reporting
El enfoque de las métricas y el sistema de medición utilizado pueden variar y esas diferencias tendrán sus consecuencias en los informes. Aquí es donde intervienen los cuadros de mando, que facilitan la tarea de alineación de las medidas de desempeño con los objetivos generales de la cadena de suministro, permitiendo controlar la aparición de desajustes, para prevenir errores de consistencia o calidad en el reporting.
Los informes de gestión de rendimiento comparan los resultados reales con los objetivos predeterminados en diversas áreas de la operación logística y, por lo tanto, constituyen una parte importante de las funciones de presupuesto, planificación, así como del sistema integral de control.
Estos informes proporcionan la visibilidad necesaria para tomar decisiones puntuales, si se produce una situación de excepción, pero también tienen otra misión. Periódicamente, sobre la base del reporting, se mide el desempeño logístico y la idoneidad de la estrategia de la cadena de suministro para ajustar el plan de implementación estratégica al proceso general de gestión del supply chain. Este ajuste puede tomar varias formas y desembocar en acciones como:
- La modificación de la estrategia.
- La reasignación de recursos.
- El ajuste del plan de acción.
- La revisión de objetivos.
- El establecimiento de nuevos indicadores de gestión.
Cuadro de mando e indicadores de gestión
A través del cuadro de mando, se puede acceder a las métricas que proporcionan los diferentes indicadores de gestión establecidos, para tomar conciencia del rendimiento logístico de la compañía. Los distintos elementos de la cadena son evaluados en función del desempeño medido, que permite conocer y, por tanto, controlar:
- La productividad de los diferentes componentes de la cadena.
- El rendimiento financiero real contra el previsto.
- La aparición de nuevas tendencias.
- El grado de cumplimiento de las metas o expectativas de la compañía.
- El desempeño de los competidores.
- La evolución del mercado.
Los indicadores de gestión hacen que el dashboard pueda actuar como una herramienta de auto-diagnóstico pero, para ello, cada KPI debe asociarse a objetivos pre-establecidos, que puedan sujetarse a cambios cuando se detecten nuevas necesidades en cada área o en la organización en conjunto. El valor principal del uso de métricas e indicadores de gestión es el de tener la oportunidad de examinar los procesos, analizar los progresos y compartir el aprendizaje y las mejores prácticas entre áreas. Tres ventajas importantes en un entorno tan competitivo y dinámico como es el de la logística, que obliga a las empresas a explotar su potencial de adaptabilidad y mejora si quieren subsistir.
En este sentido, y en un IBM propone IBM Cognos, una solución que ofrece todo lo necesario para basarse en la analítica y lograr el máximo rendimiento. Por ejemplo, permite una funcionalidad de panel de control (dashboard) que permite acceder, interaccionar y personalizar el contenido para dar soporte a la toma de decisiones.
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