Parece que desde el año 2009 no se habla de Business Intelligence (BI). Es como si toda la red se hubiese confabulado para aislar un término que ya no resulta atractivo, que parece incluso pasado de moda... Lo curioso es que todos los negocios siguen necesitando recurrir a su BI y, por eso, las empresas no cejan en su empeño de superar los retos que las nuevas arquitecturas requeridas para la inteligencia de negocio de última generación les imponen.
Créditos fotográficos: istock a_Taiga
Business Intelligence en la empresa hoy
Existen cuatro retos principales a los que los sistemas de Business Intelligence deben enfrentarse en la actualidad.
1. Costes elevados: BI ha evolucionado y se ha expandido. Cualquier tipo de negocio cuenta con su herramienta de Business Intelligence, lo que conlleva un gasto, asociado al coste de la tecnología, el de mantenimiento y el de la propia aplicación escogida.
2. Incremento del volumen de usuarios: el número de usuarios de negocios está aumentando drásticamente en lo que a BI respecta. Ya no se trata de analistas especializados o científicos de datos sino que, especialmente al comenzar a moverse en el ámbito de la inteligencia operativa, se unen otros muchos usuarios, de perfiles menos técnicos y que, precisamente por ello, requieren un mayor apoyo, desde un punto de vista de aplicación.
3. Nuevas fuentes de datos: en el área de Bussines Intelligence operacional existe un mayor número de fuentes de datos disponibles, los cuales se emplean en usos sofisticados, que difieren de las formas tradicionales, más estratégicas o tácticas de BI. Ello no significa que la necesidad de BI tradicional disminuya o se debilite, sino que revela que es preciso ampliar las arquitecturas de BI para abrazar estas nuevas áreas y estar en disposición de exprimir sus posibilidades.
4. Necesidad de un mayor rendimiento: que debe considerarse como un foco importante, al ser crucial la velocidad en el tiempo de respuesta para muchas consultas de inteligencia operativa, y serlo también en los casos en que ésta ha de usarse para dar apoyo a las consultas de ejecución más estratégicas. Se trata de un entorno de carga de trabajo mixto, que puede causar un problema de rendimiento (relacionado con la escalabilidad) si no se tienen previstas las soluciones.
El enfoque de Business Intelligence
El éxito en el proceso de adaptación del Business Intelligence a la nueva realidad es una cuestión de enfoque. Para avanzar sobre seguro, hay que seguir las siguientes premisas:
-
Utilizar BI como una hoja de ruta para cada nuevo proyecto.
-
Partir de una base tecnológica sólida, que continúa siendo necesaria.
-
Primar un enfoque disciplinado, que sea garantía de consistencia, fiabilidad y reutilización.
-
Evitar la creación de silos departamentales y esforzarse por buscar las opciones de integración.
La arquitectura sobre la que se construye el Business Intelligence es esencial para lograr el enfoque deseado y, por eso, debe ser:
-
Basada en la lógica y siempre adaptable en cuanto a las necesidades físicas de implementación.
-
Potenciadora de la productividad.
-
Promotora de la reutilización de datos.
-
Pieza fundamental en el intercambio de datos y resultados de análisis.
-
Generadora de eficiencia en los procesos de calidad de datos y de integración de datos.
Post relacionados: