“En el año 2020, el 50% de las organizaciones líderes dispondrán de un CDO con un nivel de influencia en la estrategia y una autoridad similar a las de su CIO”.
Tal como Gartner predijo, la figura de los Chief Data Officer (CDO) sigue ganando peso en los puestos directivos de las empresas. Se trata de un perfil sumamente importante y en constante evolución, responsable de liderar la transformación de su organización que han impulsado los datos.
Se trata de una persona, además que en su evolución, se ha acercado cada vez más a los máximos responsables de la empresa como consecuencia lógica de la actual coyuntura digital que están afrontando todas las organizaciones.
Los principales aspectos que hacen del CDO un perfil fuerte, una figura que añade valor real y que cada vez está más justificada su cercanía a los consejos de administración y a los máximos responsables de las compañías son, básicamente, el buen gobierno, la calidad del dato, además de su capacidad de extraer valor de la información. Hoy en día, los CDO son perfiles decisivos para que las empresas puedan ofrecer a sus clientes la experiencia digital que demandan, hecho que se demuestra con el prestigio que han adquirido y el aumento sustancial de recursos y presupuesto que manejan.
El CDO debe hacer uso de este prestigio y poder para abordar estrategias ofensivas, de desarrollo de nuevos negocios e introducción de tecnologías innovadoras, que se distancien de los sistemas IT centralizados. Los objetivos del CDO están, primordial y claramente, orientados hacia el negocio, desplazándose desde el mero ahorro de costes y la mitigación de riesgos a la creación de valor y generación de ingresos para sus compañías.
En las organizaciones de hoy, la gestión global del dato, su correcto análisis y la creación del mayor valor posible para el cliente o consumidor a partir de él, se consigue mediante avanzadas técnicas y ciencias de datos, y los demás elementos principales de la transformación digital, así como la aplicación de las necesarias medidas de seguridad, prevención y responsabilidad sobre este nuevo activo de la empresa.
El perfil de un profesional, como el Chief Data Officer, que defina las estrategias de análisis, gobierno y ciclo de vida del Dato, es importantísimo –si no vital- en el actual ecosistema digital. No en vano, en muchos casos debe reescribir los procesos internos de la compañía y modernizar las estrategias al mismo tiempo que debe comprender la enorme dependencia sobre los datos que cada departamento y sus miembros tienen.
El papel central del CDO, en la transformación digital de las empresas, le obliga a ejercer un liderazgo inequívoco, a ser la punta de lanza de los cambios y a desprender el carisma y confianza necesarios para convencer al resto de la organización de seguirle. Alguien le ha definido como “el líder intelectual que es capaz de definir la visión empresarial, mediante innovaciones que pone al servicio del grupo y relaciones con el ecosistema digital para aprovechar el conocimiento y experiencia externo en beneficio de su empresa”.
La consultora Gartner definió los 6 aspectos clave que los CDO deben tener en cuenta a la hora de equilibrar el creciente volumen de datos y su análisis ha desarrollado seis estrategias clave de "sobrevivir y prosperar" que deberían ayudar a los CDO a equilibrar las crecientes demandas de datos y análisis:
- Definir y compartir en la empresa una “Carta de Datos y Analítica” con el objetivo de enseñar como encajan los datos y su análisis en la misión de la organización a los perfiles que no necesariamente tienen el conocimiento y experiencia necesaria en ésta área.
- Adoptar y comunicar un enfoque bimodal que permita administrar dos modos separados y coherentes de entrega de TI, uno centrado en la estabilidad y el otro en la agilidad.
- Establecer una estrategia y una hoja de ruta para la maduración de la compañía desde el Business Intelligence hacia un enfoque analítico y predictivo.
- Mantener viva la estrategia, introduciendo revisiones trimestrales que permitan incorporar fuentes de datos nuevas, casos de uso, algoritmos, herramientas y tecnologías, además de servir para compartir casos de éxito.
- Convertirse en el «centro de gravedad» para el análisis de datos, resolviendo o siendo consciente de los problemas dentro del equipo inmediato y difundiendo lo que está ocurriendo en la comunidad global.
- Conseguir alianzas estratégicas con otros responsables del área de TI, así como en las otras áreas de negocio, sobre todo si la gestión de ciertos datos no está totalmente bajo su control.
Los Chief Data Officer deben estar preparados para desempeñar su misión con un conjunto de tácticas que permitan hacer frente a los cambios constantes en la forma de hacer negocios. Entrenarles y apoyarles mediante estrategias y tácticas inteligentes de gestión del cambio es clave para hacer crecer la próxima generación de profesionales con impacto en los negocios digitales.