Plantearse el futuro de la movilidad en los proyectos de BI no equivale a cuestionar su vigencia o necesidad en y para los tiempos venideros, sino todo lo contrario: el trepidante ritmo al que se mueve el mundo, el acortamiento de las distancias y la escasez de tiempo disponible marcan ya hoy el imparable avance de la cuestión de la movilidad hacia el centro de atención de las estrategias de Business Intelligence.
Afirmar que el futuro de los proyectos de BI pasará indefectiblemente por la integración y la optimización de sistemas y herramientas de movilidad no parece ser ya nada nuevo. Y es que, ante la realidad de los datos, sobran argumentos: el contacto directo con el público, obtener información no mediada y conocer sus tempos, ritmos y necesidades de primera mano se impone como una condición sine qua non para la captación y la fidelización de clientes, algo que sin duda ocupa un papel central en cualquier actividad empresarial.
Una estrategia empresarial adoptada a priori, por perfecta que pueda parecer, si no se doblega ante las pulsaciones del público y el mercado adaptándose a ellas con agilidad, está condenada al más rotundo fracaso. Claro que esto solo se consigue disponiendo de un sistema de movilidad que, al servicio de la estrategia empresarial, permita discutir sobre ella, enriquecerla con nuevos datos e informaciones en tiempo real, desde cualquier lugar y en cualquier momento, y tomar decisiones ajustadas a las condiciones reales del sector.
Más atención personalizada: más movilidad
Un 90 % de los consumidores concuerda en conceder a la atención personalizada el primer puesto en cuanto a sus expectativas como clientes: esperan que se les trate individualmente, que se conozcan al detalle sus preferencias y necesidades, y que se les responda con ofertas ajustadas a las mismas. Sin embargo sorprende que, ante un porcentaje tan solemne como este 90 %, solo un escaso 30 % de las compañías afirme estar en disposición de dar una respuesta a la altura de esta expectativa. Pese a ello, en 2013, el 50 % del conjunto organizaciones de todo el mundo registraron una mayor movilidad, algo que sin duda ofrece grandes pistas sobre lo que nos depara el futuro en este asunto.
El contacto directo con el cliente es esencial, ya lo hemos visto; y el único modo de cubrir la gran demanda de atención personalizada, que como vemos es casi universal, es integrando sistemas de movilidad a los proyectos BI. Así lo ven cada vez más compañías, que presionan con ahínco al sector de las TIC y a los profesionales de TI para que incorporen mejoras en sus sistemas de movilidad.
Si tuviésemos que resumir en pocas palabras el futuro de la movilidad en los sistemas de BI, diríamos que el mañana vendrá de la mano de un cambio de mentalidad en la concepción de la movilidad, a todos los niveles y en todos los sentidos. Una transformación profunda del escenario del Business Intelligence que está teniendo lugar ya en estos mismos instantes y que en cierto modo podríamos enunciar como el fin de los tiempos para las herramientas que permitían mantener el contacto con la oficina cuando no se estaba en ella, y el principio de la era de los sistemas que garantizan el acceso inmediato y en tiempo real, el trabajo colaborativo y el diseño de estrategias corporativas desde cualquier momento y lugar, permitiendo tomar decisiones acertadas sobre la marcha y ofrecer una atención cada vez más personalizada a cada cliente. Una conversión radical del espacio y el tiempo tradicionales que se lleva consigo la residencia en un espacio concreto de trabajo, imponiendo la movilidad como un valor irrenunciable para cualquier sistema de Business Intelligence.
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