La visualización creativa es una fuente de ventajas continuas en entornos no empresariales. Fuera del ámbito de negocio, cada vez son más personas las que la utilizan para crecer como individuos y potenciar sus fortalezas, enfrentándose al día a día con una actitud más positiva y tenaz. En las organizaciones, las nuevas capacidades adquiridas de inteligencia de negocio y la accesibilidad casi sin límites al mar de datos, hacen que la visualización creativa sea imprescindible, para poder llegar al núcleo de la información. Visualización = valor, ya lo decía Gartner.

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Hay muchas maneras de evaluar la calidad de los datos analíticos en términos de precisión, exactitud, representatividad, exhaustividad y sensibilidad en relación con el uso para el que se prevé que se destinen. El control de calidad ayuda a lograr mejores resultados en estas evaluaciones y, por tanto, a optimizar la toma de decisiones y reducir el riesgo.

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Big Data y las herramientas de analítica de datos han demostrado sobradamente su gran versatilidad, y el hecho de ser capaces de adaptarse a las necesidades y las exigencias de multitud de sectores de negocio, a ámbitos tanto públicos como privados, y a terrenos tan dispares entre sí como la investigación científica o la gestión del tráfico rodado en los grandes núcleos urbanos.

El cuadro de mando comercial es una herramienta fundamental para garantizar una correcta gestión de ventas y una adecuada monitorización de las actividades de relación con el cliente. Su naturaleza (requisitos, diseño, operatividad, funciones...) es análoga a la del Cuadro de Mando Integral (CMI), un instrumento clave de gestión estratégica, por lo que no es de extrañar que el cuadro de mando comercial presente elementos y características similares a los del CMI, como los indicadores clave de desempeño o KPI.

La visualización de datos deviene clave en multitud de actividades y tareas relacionadas con la analítica de datos. Pero no son estos los únicos ámbitos de aplicación de las herramientas de visualización; como hemos podido comprobar en otras ocasiones, el abanico de posibilidades que ofrece es tan amplio como variado.

Hace pocas semanas incidíamos de nuevo en las estrategias de marketing más adecuadas para lograr la fidelización de los clientes, una tarea en la que las herramientas de analítica avanzada desempeñan un papel crucial.

Una importancia que, lejos de disminuir, se incrementa si trasladamos este rol al diseño y la elección de las estrategias social media más adecuadas para la captación de clientes potenciales, sobre los cuales no se cuenta con datos e informaciones tan abundantes como en el caso de pretender la lealtad del consumidor ya reclutado. 

Las estrategias social media apoyadas en el uso de herramientas Big Data Analytics, a diferencia de otras aplicaciones de la inteligencia de negocios en el ámbito corporativo, nacieron y se desarrollaron desde el primer momento pensando, también, en las pequeñas y medianas empresas. La misma naturaleza de las redes sociales se presta a ello, y muy especialmente en mercados como el español, en el que la presencia y la actividad de las PYME supera con creces la de grandes compañías y corporaciones.

La cuestión de los ratios financieros no es otra que la que ha centrado nuestra atención en ocasiones anteriores: los indicadores clave de desempeño o KPI financieros, el establecimiento de los cuales debe responder, en primera instancia, a un análisis pormenorizado de la situación financiera real de la organización.

Sobre la elección y la implementación de indicadores financieros en el Cuadro de Mando Integral (CMI) existe abundante información en este mismo blog; sin embargo, existen menos referencias a su importancia en la proporción de la visión integral de la compañía que ofrece, como ventaja destacada, el uso del CMI, así como sobre los propósitos particulares de los distintos tipos de ratios financieros que podemos emplear con este fin.

Nos hallamos plenamente inmersos en una época de gran desarrollo de la inteligencia artificial (IA). El descubrimiento de nuevas aplicaciones y, sobre todo, la posibilidad de materializarlas ha dado un nuevo impulso a la investigación en este campo.

Como hemos advertido en anteriores ocasiones, existen ciertos límites teóricos y conceptuales de la IA que, hasta el momento, siguen estableciendo un techo perfectamente definido para el desarrollo de este tipo de soluciones. Sin embargo, y pese a ello, los avances experimentados en algunos campos como el de la programación neurodinámica permiten augurar un cambio radical de paradigma, en este terreno, en un futuro muy cercano.

Los proyectos de ciudades inteligentes o smart cities están en pleno auge, con un papel de referencia que no se limita únicamente al diseño y la implementación de soluciones tecnológicas inteligentes para hacer las ciudades más cómodas, accesibles y amigables: su influencia llega incluso a alcanzar ámbitos tan dispares entre sí como la planificación urbanística o el diseño de nuevas políticas de convivencia.