Tras la conclusión de la primera fase de implementación del cuadro de mando integral, ha quedado definida la dirección a seguir. Es necesario comenzar a concretar la materialización de los diferentes enfoques a través del consenso del equipo ejecutivo, que incluirá a su equipo gerencial de apoyo.
En esta etapa se necesita aunar la visión sobre los objetivos estratégicos que se verán reflejados en el cuadro de mando integral, además de completar los detalles referentes a la definición de objetivos estratégicos y de las medidas clave (indicadores clave) de cada perspectiva: financiera, mercado/clientes, procesos internos e I+D.